Al menos una veintena de teléfonos celulares obtuvieron como botín dos individuos que asaltaron las oficinas administrativas del supermercado Soriana de Plaza Tutuli, la medianoche del jueves.
Se presume que los desconocidos no lograron abrir la caja de valores, pero si ocasionaron daños en el sistema de las cámaras de vídeo, incluso robaron el cerebro de ese sofisticado equipo.
Ello después de que presuntamente ingresaron por el techo de ese centro comercial, específicamente por ductos del aire acondicionador.
El guardia de seguridad, Jesús Armando I. V., de 34 años, relató a elementos policiacos, que a eso de las 23:30 al estar realizando un recorrido en el interior del centro comercial, subió a la planta del área de recepción.
De inmediato, se percata de daños en el sistema de cámaras de vigilancia y al revisar el cuarto de valores salieron dos sujetos.
Describió a uno de ellos de estatura baja y tez morena y de unos 30 años de edad. Vestía camisa rayada.
El segundo maleante es delgado y traía pantalón y chamarra oscura. Ambos lo agredieron físicamente derribandolo al piso y luego se echaron a correr para salir de la tienda.
Se presume que abandonaron el edificio comercial por las puertas de emergencias.
Mientras que el guardia al intentar ir tras su persecución cayó de su propia altura por las escaleras que conducen al área de recepción.
Quedó tendido en la escalera hasta donde llegaron paramédicos de Cruz Roja que le dictaminaron posible fractura en pierna derecha trasladandolo a un hospital.
Durante la inspección policial detectaron un faltante de teléfonos celulares, sin establecerse la cantidad exacta, pero se estimó en unos 20 aparatos.
También descubrieron que los ladrones se llevaron el cerebro de las cámaras de vigilancia el cual fue arrancado violentamente.
De acuerdo a minuciosa inspección, determinaron que los intrusos no lograron penetrar porque fueron descubiertos por el vigilante y decidieron huir a fuerza de carrera.
De haberlo logrado, se presume que habrían obtenido una suma considerable de efectivo, ya que ahí se concentra el dinero de las ventas del día, pero no alcanzaron su objetivo.
Elementos de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal (AMIC) de la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE), también tomaron nota del singular robo en el conocido en complejo comercial.